Para elegir un fondo de inversión que se ajuste a tus necesidades, es fundamental conocer tu perfil de riesgo, es decir, cuánta exposición estás dispuesto a asumir a cambio de obtener una determinada rentabilidad. Asimismo, es importante tener claros tus objetivos: ¿Son de largo o corto plazo? ¿Esperas crear un plan de jubilación o inviertes para pagar tus estudios? ¿Lo haces por algo en concreto como comprar una casa o irte de viaje?
Según sus respuestas y factores como su nivel de capital o su edad, el producto de inversión adecuado para usted puede cambiar. No todos los instrumentos funcionan para todas las personas, pues es fundamental estar en un fondo de inversión en el que te sientas cómodo y que esté alineado con tus ingresos, tolerancia al riesgo, objetivos, etapa de la vida en la que te encuentras y demás.
Baja diversificación
Como comentamos en el artículo El error del 77% de los inversores españoles, uno de los mayores errores que cometemos a la hora de invertir es la baja diversificación. Hoy es mucho más fácil y económico invertir fuera de nuestras fronteras. Puedes beneficiarte del crecimiento o buen comportamiento de las grandes empresas aunque estemos en recesión en España. Por tanto, si tu cartera de fondos no está suficientemente diversificada, es recomendable traspasar una parte hasta conseguirlo.
Debido a la diversificación mencionada anteriormente, puede sentirse cómodo invirtiendo en fondos de renta variable, renta fija, oro o por área geográfica (Asia, Europa, Estados Unidos). Si el fondo asiático ha subido mucho un año, para mantener equilibrada tu cartera puedes vender o traspasar lo que más ha subido a donde lo ha hecho menos. De esta forma mantienes el equilibrio de la cartera.
Lo que no te cuentan de los planes de pensiones
Si no te has saltado la parte anterior, ya sabes más de planes de pensiones que la mayoría de la gente. Ahora te toca descubrir esas medias verdades sobre este producto de ahorro para el retiro. Estas son las 8 cosas que intentarán ocultarte cuando se vendan.
Mucha gente piensa en el plan de pensiones como un producto garantizado, una especie de hucha en la que depositar los ahorros para que crezcan y poder recuperarlos después. Nada más lejos de la realidad. Tu plan de pensiones puede perder dinero independientemente de la categoría en la que aparezca.
