Es la inversión que realiza una empresa al comprar un bien mueble o inmueble que utiliza como instrumento de trabajo por un período superior a un año. Este activo se degrada con el tiempo y por lo tanto pierde valor. Por esta razón, estos gastos pueden ser deducidos.
Algunas de las estrategias que puedes utilizar para ahorrar en el pago del impuesto de sociedades son:
Deducción de pérdidas por deterioro del valor de los activos:
Si eres una pequeña negocio, puede deducir pérdidas por el deterioro de sus créditos. Este es el caso cuando hay una pérdida de valor de muebles o bienes inmuebles si su valor en libros excede su valor recuperable. Son deducibles las pérdidas por deterioro de créditos derivadas de la posible insolvencia de los deudores. Estas pérdidas son deducibles siempre que:
- Ha transcurrido el plazo de seis meses desde el vencimiento del bono.
- Que el deudor sea declarado en quiebra.
- Que el deudor sea procesado por el delito de hurto de bienes.
- Que las obligaciones hayan sido reclamadas judicialmente o sean objeto de un litigio o procedimiento arbitral del que dependa su recuperación.
Deducción de pérdidas por deterioro del valor de los activos:
Si eres una pequeña empresa, puedes deducir pérdidas por deterioro de tus créditos. Este es el caso cuando hay una pérdida de valor de muebles o bienes inmuebles si su valor en libros excede su valor recuperable. Son deducibles las pérdidas por deterioro de créditos derivadas de la posible insolvencia de los deudores. Estas pérdidas son deducibles siempre que:
- Ha transcurrido el plazo de seis meses desde el vencimiento del bono.
- Que el deudor sea declarado en quiebra.
- Que el deudor sea procesado por el delito de hurto de bienes.
- Que las obligaciones hayan sido reclamadas judicialmente o sean objeto de un litigio o procedimiento arbitral del que dependa su recuperación.
Depreciación
La depreciación no es más que la reducción de activos o pasivos en la contabilidad de la empresa. Hay casos en los que tienes la libertad legal de amortizar las inversiones durante la cantidad de años que quieras, ahorrando así tus impuestos.
Además, si tu empresa es pequeña, puedes optar por la amortización acelerada. Esta se cuantifica aumentando el coeficiente de amortización lineal en 1,5 o incluso 3, según diversos criterios y las tablas de Hacienda aprobadas por el BOE.
El impuesto de sociedades es un impuesto que grava los beneficios obtenidos por las sociedades mercantiles y otras personas jurídicas durante un ejercicio fiscal, grava las rentas de las sociedades y otras personas jurídicas , residente en todo el territorio español. Estas entidades deberán presentar la declaración aunque no hayan desarrollado una actividad durante el período impositivo de que se trate o no hayan obtenido rentas sujetas al impuesto, como regla general.